Todos pretendemos tener una dentadura luminosa y que se vea blanca cuando sonreímos. Sin embargo, en ocasiones, nos sorprende el reflejo del espejo que muestra una dentadura amarillenta o manchada.
Ante esta situación, intentamos buscar productos que permitan mejorar su aspecto.
Bicarbonato de sodio para los dientes
El bicarbonato de sodio es una de las opciones más eficaces y naturales para blanquear los dientes rápidamente.
Entonces, surge el interrogante cómo blanquear los dientes con bicarbonato y hay diferentes formas de utilizarlo.
- Una manera de aplicar el bicarbonato es unir media cucharada de polvo con una cucharadita de agua tibia, mezclando hasta que se forme una pasta. Pasarla por los dientes y dejarla actuar uno o dos minutos. Enjuagar la boca para retirar el bicarbonato completamente y cepillarse los dientes con dentífrico.
- Otra propuesta es colocar la pasta de dientes que se utiliza diariamente sobre el cepillo de dientes y añadir media cucharadita de bicarbonato; frotando los dientes con cuidado.
- Hay una alternativa que combina bicarbonato de sodio y jugo de limón. Para usar esta mezcla hay que formar una pasta suave mezclando tres o cuatro gotas de limón con una cucharadita de café de bicarbonato. La pasta se aplica en la dentadura con un cepillo y se deja actuar un minuto. Para finalizar se enjuaga con agua tibia.
Estos métodos ayudan a eliminar o minimizar la tonalidad de las manchas en los dientes y a disminuir la placa. Sin embargo, sólo hay que usar el bicarbonato una o dos veces al mes para no dañar el esmalte o generar sensibilidad dental.